El peor enemigo de la salud y el más alto factor de riesgo es el sedentarismo, muy por encima de otros factores de riesgo como la obesidad y el tabaquismo.
Para disminuir el nivel de colesterol, realizar cualquier tipo de ejercicio es beneficioso de por sí para mejorarlo en forma progresiva. Lo importante es que la actividad física sea planificada, sistemática e ininterrumpida para maximizar su efectividad.
Los elevados niveles de colesterol en sangre pueden deberse a múltiples factores, unos de ellos es el estrés y la incapacidad para controlarlo.
El ejercicio es una de las herramientas más simples y efectivas para combatir el estrés.
Naturalmente, la actividad física libera endorfinas, que son hormonas que producen una sensación de bienestar y placer inmediato por su efecto analgésico.
La endorfina actúa como inhibidora del dolor, y justamente, el malestar se ve potenciado por contracturas y rigideces musculares, que se traducen en mal humor y estrés.
El estrés puede elevar el colesterol por acción de una sustancia llamada adrenalina. Esta misma es un mecanismo ancestral del hombre en situaciones de estrés, que preparaba al organismo para la lucha o la huída, por eso aumenta el nivel de energía (glucosa y grasa) para poder hacer frente a esa situación.
El ejercicio es el remedio natural para ”barrer” con ese exceso de energía volcada en el torrente sanguíneo. Además de los efectos analgésicos antes mencionados.
Entonces, y además de llevar una alimentación balanceada, realizar cualquier tipo de ejercicio es fundamental para disminuir el nivel de colesterol y estrés. ¡Ponete en movimiento! ¡Vivamos sanos, tranquilos y de buen humor
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